jueves, 19 de noviembre de 2009


LOS TRASTORNOS DEL MOVIMIENTO EN LAS PERSONAS CON PARKINSON/ BENEFICIOS DE LA FISIOTERAPIA

La enfermedad de Parkinson es un desorden del sistema nervioso central que afecta a estructuras del cerebro encargadas del control y coordinación del movimiento, del mantenimiento del tono muscular y de la postura.

Además del tratamiento farmacológico y quirúrgico, la fisioterapia es muy útil para mejorar la calidad de vida de los pacientes con enfermedad de Parkinson. Algunos síntomas que aparecen en la enfermedad de Parkinson y que afectan a la función motora son:

  • Enlentecimiento del movimiento o bradicinesia: es la lentitud para iniciar y ejecutar un movimiento. Los músculos no se activan de forma suficiente en el momento oportuno.

  • Esta lentitud puede afectar a distintos tipos de movimientos: Los movimientos repetitivos (cepillarse los dientes, remover una cacerola, limpiarse los zapatos, …); los movimientos
    finos (conectar un enchufe, pasar la página de un periódico...); los movimientos secuenciales (abrocharse una serie de botones), y los movimientos voluntarios (caminar,
    escribir, vestirse …). También pueden verse afectados los movimientos automáticos (parpadear, balancear los brazos al caminar, tragar, …). Este tipo de movimiento
    se ve más afectado que los movimientos aprendidos, con lo que se puede llegar a tener dificultades para andar correctamente y sin embargo puede realizar un determinado pase de baile sin dificultad alguna. En general, los movimientos que están asociados a estímulos externos y se encuentran menos afectados que los realizados espontáneamente. Por ejemplo, es más fácil subir escalones que andar por una superficie plana.
  • La acinesia es la ausencia o pobreza de movimientos espontáneos
    como parpadear o tragar saliva.
  • El temblor no está siempre presente, pero es más evidente en reposo y disminuye al realizar un movimiento. Desaparece cuando la persona duerme y se reduce cuando está muy relajada; sin embargo, empeora en estados de tensión o ansiedad. Normalmente el temblor es unilateral; es decir, que empieza en una mitad del cuerpo, convirtiéndose en bilateral, afectando al otro lado del cuerpo a medida que la enfermedad progresa. La extensión y la severidad del temblor varían de una persona a otra.
  • La rigidez muscular consiste en una resistencia o falta de flexibilidad para mover pasivamente las extremidades. Con la progresión de la enfermedad, la rigidez puede volverse tan severa que los músculos se perciben tensos incluso cuando no deberían estarlo; es decir, cuando la persona está en reposo. Existe una disminución de la expresión facial debido a los efectos de la bradicinesia, a los cuales hay que sumar la rigidez de los músculos faciales.La rigidez puede dar lugar a dolores y calambres musculares.
  • Los trastornos de la postura consisten en la inclinación del cuerpo y la cabeza hacia adelante. Tendencia a la postura en flexión de rodillas, caderas y codos. Junto al temblor y la rigidez esto provoca fatiga muscular. Cuando la persona está sentada tiende a inclinarse hacia un lado y no puede corregir la postura sin ayuda.
  • Los trastornos de la marcha y el equilibrio se producen en la enfermedad de Parkinson debido a los trastornos posturales. El centro de gravedad no recae sobre los pies y además los brazos no se balancean al andar proporcionando la estabilidad necesaria.Los problemas de equilibrio se hacen más evidentes durante la marcha.
    Los trastornos más frecuentes que pueden aparecer durante la marcha
    son:
    Inicio dubitativo: dificultad para levantar el pie y empezar a
    andar. Se dan pequeños pasos antes de adoptar un ritmo normal.
    Disminución o pérdida del balanceo de los brazos al andar.
    Marcha lenta arrastrando los pies.
    Festinación: el paciente empieza a caminar cada vez más rápido, con los pasos cada vez más cortos, inclinándose hacia adelante.Esto puede provocar caídas.
    Dificultad para girar mientras se camina.
    Episodios de bloqueo. La persona se siente como "pegada" al suelo, incapaz de levantar los pies para dar un paso. Esta "congelación" suele producirse, por ejemplo, al atravesar una puerta o en sitios estrechos.
  • Las discinesias son movimientos involuntarios que suelen aparecer
    después de varios años de tratamiento con fármacos. La presencia de
    estos movimientos puede entorpecer todavía más la marcha.

¿CÓMO PUEDO MEJORAR MI ESTADO FÍSICO?

La fisioterapia puede ayudarle a mejorar la movilidad y favorecer las actividades de la vida diaria, su independencia y su integración en la vida social y familiar. La fisioterapia deberá adaptarse a las condiciones y necesidades de cada paciente.

Objetivos principales de la fisioterapia

  1. Potenciar la actividad muscular y el buen funcionamiento de
    todas las articulaciones para prevenir a largo plazo dolores y
    deformidades.
  2. Aumentar el volumen respiratorio permitiendo una mejor adaptación
    al esfuerzo físico.
  3. Reeducar la postura para prevenir o mejorar dolores relacionados
    con ella.
  4. Prevenir trastornos circulatorios ocasionados por la falta de
    movilidad.
  5. Mejorar la movilidad, coordinación, equilibrio, marcha y reacciones
    de enderezamiento.
  6. Mantener y/o restablecer la autonomía del paciente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario